Este martes, Bolsonaro terminó con las especulaciones y salió a contar que tiene coronavirus. En ese momento, el mandatario se mostró desafiante.
El lunes por la noche comenzó a circular el rumor que indicaba que Jair Bolsonaro había dado positivo en coronavirus. El presidente de Brasil comenzó a tener síntomas, compatibles con el virus, el domingo por la noche.
Para terminar con los rumores, el mandatario desde su residencia habló frente a tres periodistas. Bolsonaro confirmó que sus síntomas son “cansancio, indisposición y fiebre de 38 grados”, y que su prueba de COVID dio positivo.
“La vida continúa. Vamos a cuidarnos, especialmente los más ancianos y quienes tienen alguna enfermedad que sea un factor de riesgo”, expresó ante los periodistas.
Como así también el mandatario indicó que comenzó un tratamiento con hidroxicloroquina, una droga que genera polémica debido a que su uso no se comprobó que sea efectivo para combatir el virus. Con este decisión, volvió a mostrarse controversial con su postura.
“Estoy bien, normal. Incluso quiero dar un paseo por aquí, pero no puedo debido a recomendaciones médicas”, confirmó frente a cámara y se mostró utilizando barbijo, siendo una de las pocas veces que se mostró con el elemento que se indica como una importante medida para evitar la propagación.
Pero Bolsonaro se encontraba frente a los tres periodistas, sin cumplir con la medida de distancia pero en un momento, tomó distancia y procedió a sacarse el barbijo, poniendo en riesgo a los presentes. “Miren mi cara, estoy bien”, expresó el mandatario, gritando.
Este gesto del presidente se relaciona directamente con su pensamiento que sostiene, siendo que trata a este virus como algo sin importancia por eso priorizó la economía antes que aplicar las medidas sanitarias para evitar lo que sucedió en aquel país ya que hasta el momento se contabilizan 1,6 millones de infectados y 65.556 muertos.