El fotógrafo intentó vender la imagen por un millón de dólares. La tomó a corta distancia. Se lo ve postrado en una habitación de su mansión, en Ginebra, Suiza.
A pocos días de cumplirse tres años del accidente que lo dejó inmovilizado, la privacidad del heptacampeón de la Fórmula 1 fue burlada. El hombre cuya identidad no se conoce, consiguió la imagen más buscada por los medios de todo el mundo.
El caso provocó la indignación del entorno familiar que confirmó el hecho y pidió la intervención de la justicia.
Según el sitio “vip.de”, un fiscal actuó de oficio y frenó la difusión de las fotos. "El estado de salud de Michael no es un asunto público y así seguirá siendo. Michael siempre protegió mucho su privacidad", indicó el funcionario.
El piloto sufrió un accidente mientras esquiaba en los Alpes franceses. Desde entonces sus familiares evitaron la difusión de imágenes del automovilista. Tomaron todo tipo de medidas de seguridad alrededor de la casa y polarizaron los vidrios para evitar a los paparazzi.
Desde que quedó postrado, muchos intentaron sacar fotografías utilizando drones y helicópteros y sobrevolaron la vivienda con la intención de conseguir imágenes.