Dirigentes y jefes municipales de la agrupación justicialista Nuevo Norte Peronista expresaron su firme apoyo a la propuesta de reforma constitucional y política llevada a cabo por el Gobernador Fellner.
El Movimiento Nacional Justicialista ha corporizado históricamente las grandes transformaciones del País: esto es así porqué desde Juan y Evita Perón hasta Néstor y Cristina Kirchner, fue la primera y hasta hoy única expresión política que planteó con efectividad los cambios necesarios que garanticen la equidad, la movilidad social ascendente y la inclusión de los más postergados.
Un Movimiento que con su tercera posición no se inclinó a los mandatos de la sinarquía internacional, promovió la industrialización interna y el desendeudamiento para lograr independencia económica y política.
A través de una Reforma Constitucional con agenda previa, o sea con fijación clara de los temas a tratar, se propone prohibir la reelección en todos los cargos políticos, provinciales y municipales: es una jugada fuerte y saludable, para asegurar y acelerar el necesario recambio generacional y evitar el enquistamiento de las castas dirigentes.
También se propone elevar a rango constitucional al Consejo de la Magistratura, para mejorar con claridad el sistema de selección de jueces de la república y asegurar el mejor funcionamiento de esa función básica del Estado.
Se plantea también reformar las comisiones municipales para transformarlas en Intendencias, creando la figura del Vice-Intendente para desalentar las permanentes peleas y conspiraciones de algunos Concejos Deliberantes, que perjudican y paralizan el funcionamiento del Municipio.
Se propone realizar elecciones para cargos provinciales y municipales cada cuatro años.
Ello permitiría por un lado disminuir los costos de la política tan justamente criticados por todos, y que además los cuerpos legislativos tendrían coherencia política con los poderes ejecutivos respectivos, ya que todos los diputados entrarían con un mismo Gobernador y se irían con él.
Ello fortalecería la gobernabilidad en toda la provincia y en los mismos municipios, ya que esta tesitura se replicaría entre intendentes y concejales.
Son muy lamentables las respuestas de Gerardo Morales, que hace treinta años ocupa cargos políticos sin parar: se opone a la reforma pateando la pelota afuera, diciendo que hay temas más urgentes que tratar.
Nosotros decimos que una cosa no quita la otra, o sino nunca habría reformas: como hombres de gestión le decimos que los cambios son saludables, más si se trata de modernizar a la política en Jujuy.