Solo
en ciertos lugares como Jujuy, o en escenarios marginales del planeta
donde pululan grupos que gozan de elevados niveles de impunidad, es
posible que la sociedad se permita una situación como la que protagoniza
hoy José Luis Bejarano, titular de la Organización de
Desocupados Independientes de Jujuy (ODIJ): desde el 24 de julio comanda
la usurpación del SEOM y ahora será candidato a concejal en primer
término por el partido de Milagro Sala, el Frente Unidos y Organizados.
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BEJARANO Y CAYO, DETRÁS DE MILAGRO SALA. Durante la presentación del Frente Unidos y Organizados.
FUENTE: PRENSA JUJUY
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Vale indicar que Bejarano, hermano del extinto secretario General del SEOM, Juan Carlos “Pájaro” Bejarano, se infiltró de lleno en la interna del gremio municipal, al impulsar la lista Amarilla (los mismos colores de la ODIJ) que encabezaba Hugo Prieto. El 18 de julio pasado, en plena campaña electoral del gremio, en el acceso al edificio municipal y a la vista de todos, Bejarano sacó un arma de su camioneta y amenazó de muerte al empleado municipal Adrián Mirkin. Hay
filmaciones que muestran cómo vuelve a esconder la pistola en su
vehículo, donde un oficial de la policía sube y lo acompaña, sin
proceder a su detención.
La protección policial de Bejarano sólo es un aspecto de la impunidad que ostenta,
ya que luego de ese incidente y de las denuncias públicas, Milagro Sala
se mostró con él en repetidas oportunidades, demostrando así, sin lugar
a equívocos, que el sujeto goza de tu total apoyo.
De este modo, Milagro Sala y su entorno político reproducen el mismo modus operandi del fellnerismo/kirchnerismo cuando es atacado uno de sus funcionarios:
una completa ratificación que va acompañada, según el caso, de la
victimización y/o exaltación de quien recibe las críticas o es
denunciado.
Fiel
a ese estilo, Bejarano fue premiado por su comportamiento con una
candidatura a concejal. Además de impunidad, buscará inmunidad.
Pero no es el único: su lugarteniente en la ODIJ, Emilio Cayo, es candidato a diputado provincial en segundo término,
detrás de Milagro Sala. Cayo fue uno de los que movilizó junto a Prieto
y Bejarano denunciando supuestas irregularidades en la elección del
SEOM. Hay quienes califican a Cayo como uno de los nuevos ricos de
Jujuy, ya que aparece fuertemente mencionado como regente de varios
boliches bailables, entre otros productivos negocios vinculados a la
noche jujeña.
El
rabioso interés de la ODIJ en el SEOM, según se dijo desde el
principio, se explica en que, con la vuelta de Carlos “Perro” Santillán,
esta organización se quedaría sin un jugoso negocio de provisión y venta de ropa a los municipios, entre otras transacciones que aún no han sido del todo develadas, donde el gremio municipal actuaría como pantalla.
Lo
que muchos esperan ahora es ver cuál será la propuesta del flamante
candidato a concejal a los propios municipales de la capital jujeña,
considerando su total descrédito y repudio en ese sector. Y el interrogante final es si está entre sus planes usurpar una banca en el Concejo Deliberante si es que no consigue una por la forma legal: los votos de la gente.