En estas elecciones que se avecinan varios distritos tendrán una puja interesante, por distintos matices, pero sobre todo por la ratificación o rectificación que hará el pueblo del proyecto político de sus gobernantes de turno. Este es el caso de la turística Tilcara, en donde su actual intendente, Félix Pérez, deberá revalidad su cargo electivo enfrentando a nuevos rivales. Para muchos habitantes de la localidad, los 20 años que lleva al frente de la gestión se erigen en su principal rival, aunque si de contrincantes hablamos existen varios parados en la grilla de partida.
Uno de los potenciales adversarios que tendrá el Diaguita –como se lo conoce a Pérez- es Enrique Mulqui, un empresario exitoso del transporte de pasajeros y del rubro mueblería, que hace más de dos décadas se instaló en Tilcara buscando nuevos horizontes para sus emprendimientos. Nacido en la Capital jujeña, se siente un hijo adoptivo de la localidad norteña y anhela ser el próximo intendente de los tilcareños, para quienes tiene elaborado un proyecto integral que apuesta al progreso y a “salir del aletargo en el que ingresó la jurisdicción hace ya varios años”.
Mulqui, que nunca ocupó cargos públicos, forma parte de un espacio político denominado “Recuperación Peronista”, que integran además algunos hombres y militantes del PJ con sobrada trayectoria dentro del partido gobernante en la provincia. Desde esta estructura interna y a medida que pasan los días, su candidatura se agiganta, así como también el entusiasmo del justicialismo por adjudicarse la intendencia tilcareña.
Uno de los pilares de la propuesta de Mulqui es fortalecer el trabajo turístico y encarar obras que contribuyan a potenciar esa actividad económica, preponderante para la vida de los tilcareños. “El turismo crece día a día, pero se nota que existe un estancamiento en las políticas públicas que deberían direccionarse hacia ese sector que es el motor socio-económico de la localidad”.
Más adelante puso de relieve que otra de las iniciativas que tiene en carpeta está basada en la política tributaria. “Hay que establecer reglas claras y esto significa poner en marcha una nueva estrategia recaudatoria, porque no se puede vivir a expensas de lo que envía la provincia o de los fondos que llegan por la soja”, remarcó, a la vez de señalar que Tilcara es una localidad que con una buena administración y una política tributaria acorde puede dejar de lado la dependencia absoluta del Estado provincial.
“Siento que Tilcara y sus habitantes tienen una necesidad de cambio y que el mismo puede ser posible desde una visión y perspectivas distintas a las del actual jefe comunal. En la vida se cumplen ciclos y creo que Pérez en sus veinte años de gobierno cumplió un ciclo. La alternancia es saludable y creo que los tilcareños comprendieron que es necesario un cambio de autoridades y la llegada de nueva sangre a la política”, finalizó.-