El trabajo, concluido a fines del año pasado, es el resultado de un proceso llevado adelante desde hace tiempo por el IANIGLA, con el apoyo de los Ministerios de Ambiente Nacional y Provincial, en las provincias argentinas que cuentan con glaciares. Según lo relevado, Jujuy cuenta con 255 crioformas (reservas hídricas criosféricas, de hielo) que ocupan una superficie engarzada de 9.53 km2.

IGLA para el Inventario.
Respecto a la normativa vigente, la titular de la cartera ambiental precisó: “en función de la Ley Nacional vamos a modificar la normativa provincial de glaciares, que fue sancionada con anterioridad a la ley nacional y que tiene estándares de protección por debajo de lo que establece la ley 26.339 que es una ley de presupuestos minimos”.

Por su parte, Diego Moreno dijo que “se trata de una herramienta fundamental de lo que tiene que ver con el ordenamiento ambiental del territorio a nivel provincial, y con preservar las fuentes de agua dulce que, sobre todo, tienen las zonas cordilleranas desérticas como la puna de Jujuy”.
“Estos cuerpos de hielo son fundamentales porque aportan en distintos momentos del año agua a las cuencas y son clave para actividades humanas: ganadería, agricultura, turismo”, agregó el funcionario nacional.
Si bien reconoció que no había un conocimiento preciso de donde estaban ubicados estos cuerpos de hielo, estas reservas estratégicas de recursos hídricos, ponderó por otro lado que “este inventario aporta esa información de base para poder tomar decisiones, para poder dar a conocer la importancia de estas áreas y asumir las medidas para su conservación y uso sustentable”.
Finalmente, Laura Zalazar (IANIGLA), encargada de desarrollar la presentación en la jornada, indicó que luego de un trabajo de georeferenciación y luego de intervenir en los territorios provinciales, pudieron relevar 16.968 cuerpos de agua en Argentina.
En Jujuy en particular, se detectaron glaciares distribuidos a lo largo de toda la provincia, tanto en la puna como en las cuencas del este. “El hielo de esos glaciares no se puede ver a primera vista”, explicó la especialista; y agregó que “lo que se puede ver son formas, una morfología característica que nos indica que dentro de esas formaciones existe hielo. Es necesario prestar atención en la montaña para darse cuenta de que estamos frente a un glaciar. No es fácil identificarlos”.

Estuvieron presentes en la oportunidad, el secretario de minería e hidrocarburos, Miguel Soler; la Dra. Carolina Pérez, en representación de la Secretaría de Pueblos Indígenas; miembros de las comunidades indígenas; referentes y especialistas de los poderes ejecutivo, legislativo, y judicial, del ámbito nacional y provincial; así como también representantes del sector privado. Al concluir la jornada, se hicieron consultas, aportes y sugerencias. Y se dejó en claro que esta primera presentación es el puntapié inicial para socializar localmente el Inventario Nacional de Glaciares.